Carlos Alcaraz gana el Abierto de Estados Unidos y se convierte el número 1 del mundo
En tres horas de juego, Carlos Alcaraz emergió del estadio Arthur Ashe igual de efervescente, pero situado en otra dimensión.
La precoz amalgama de valentía y madurez de este portento español de 19 años ya lo tiene en la cumbre del tenis.
Carlos Alcaraz derrotó a Casper Ruud por 6-4, 2-6, 7-6 (1), 6-3 en la final del Abierto de Estados Unidos para conquistar su primer título de Grand Slam y convertirse en el hombre más joven en ascender a la cima del ranking.
Lo hizo en apenas su octava presentación en una de las cuatro grandes citas del tenis, y la segunda en el cemento de Flushing Meadows.
“Es algo que he soñado desde que era un niño”, dijo Alcaraz, quien esencialmente sigue siendo una criatura.
“He trabajado muy duro para ello. Me cuesta hablar ahora mismo. Son tantas emociones”, añadió durante la ceremonia de premiación.
Señalado para ser el próximo gran fenómeno del tenis masculino, el relevo que el deporte nerviosamente ansía ante la eventual partida de Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic — los “Tres Grandes” que han ejercido una supremacía avasalladora durante las últimas dos décadas.
Más allá de su personalidad para afrontar los grandes momentos, su juego es completo — una variedad de golpes pesados — sirvió 14 aces — y una velocidad de gacela para ir por pelotas inalcanzables por toda la cancha. Y que sabe arriesgarse, algo que quedó manifiesto al ganar 34 de los 45 minutos que completó en la red.
Hay que valorar lo que ha conseguido a tan corta edad — el primer adolescente en coronarse campeón del US Open desde Pete Sampras en 1990. Ninguno lo había conseguido en otro Slam desde la consagración de su compatriota Nadal en el Abierto de Francia de 2005.