Nick Kurtz y Drake Baldwin ganan el Novato del Año en MLB 2025

En una temporada donde batear en Grandes Ligas se ha vuelto un reto cada vez mayor, dos jóvenes demostraron que el talento y la disciplina aún pueden imponerse. El inicialista de los Atléticos, Nick Kurtz, y el receptor de los Bravos, Drake Baldwin, fueron los grandes ganadores del premio Novato del Año 2025, reconociendo sus impresionantes actuaciones durante la campaña.

El lunes, la Asociación de Escritores de Béisbol de Norteamérica (BBWAA) reveló los resultados a través de MLB Network. Kurtz se llevó el galardón de forma unánime en la Liga Americana, mientras que Baldwin se impuso en la Liga Nacional con 21 de los 30 votos al primer lugar.

Nick Kurtz, un debut de ensueño con los Atléticos

El poderoso primera base Nick Kurtz firmó una temporada de impacto inmediato desde su debut el 23 de abril. En solo 117 juegos, dejó una línea ofensiva de .290/.383/.619, con 36 jonrones y 86 carreras impulsadas.

Encabezó a todos los novatos de MLB en anotadas (90), OPS (1.002), OPS+ (173) y acumuló un WAR combinado de 10.0 entre fWAR y bWAR. Su dominio fue tan notable que se convirtió en apenas el tercer novato desde 1900 en alcanzar un OPS+ de 170 o más con al menos 450 turnos, uniéndose a José Abreu (2014) y Aaron Judge (2017).

“Es un gran cierre para mi primer año”, expresó Kurtz. “Lo usaré como motivación para seguir mejorando”.

Una noche histórica en Houston

El 25 de julio será una fecha imposible de olvidar para los fanáticos de Oakland. Ese día, Kurtz protagonizó una jornada de ensueño en Houston, al convertirse en el primer jugador de los Atléticos y el primer novato en la historia de MLB en conectar cuatro jonrones en un solo juego.

Su actuación incluyó seis hits en seis turnos y ocho carreras impulsadas, igualando a Shawn Green (2002) con 19 bases alcanzadas, la mayor cantidad registrada en un partido en la historia de las Grandes Ligas.

“Fue un día en el que todo salió bien”, recordó el joven de 22 años. “Ni siquiera lo imaginé, simplemente las cosas se dieron como tenían que ser”.

Con este premio, los Atléticos suman nueve Novatos del Año en su historia, superando a Orioles y Rojos (ocho cada uno), y consolidándose como una de las franquicias más productivas en el desarrollo de talento joven.

Drake Baldwin responde al llamado en Atlanta

Mientras tanto, en la Liga Nacional, Drake Baldwin aprovechó la oportunidad que pocos esperaban. El receptor, elegido por los Bravos en la tercera ronda del Draft 2022, comenzó la campaña como reemplazo de Sean Murphy, quien inició lesionado por una fractura en las costillas.

Baldwin, entonces considerado el prospecto número 1 de Atlanta y el número 62 en todo MLB, fue llamado directamente al equipo grande para el Día Inaugural de 2025. Lo que empezó como una emergencia se convirtió en una historia de éxito.

Tras un arranque discreto en abril, el joven de 24 años explotó ofensivamente en mayo, cuando bateó .389/.411/.593, consolidándose como una pieza clave del equipo. Su evolución detrás del plato y su producción constante lo llevaron a obtener el Novato del Año de la Liga Nacional con autoridad.

Tradición de grandes novatos

Con estos premios, Bravos y Atléticos suman un nuevo capítulo a su historia de desarrollo de talento. Baldwin acercó a Atlanta al segundo puesto histórico de más ganadores del Novato del Año, igualando a los Yankees con 10, mientras que los Dodgers siguen liderando con 18.

Por su parte, Kurtz colocó a los Atléticos en el cuarto lugar histórico con nueve galardonados, demostrando que la organización sigue siendo una cuna de futuras estrellas.

Dos promesas, un mismo futuro brillante

La temporada 2025 quedará marcada como el año en que Nick Kurtz y Drake Baldwin irrumpieron en el escenario de las Grandes Ligas con actuaciones que rozan lo legendario. Ambos demostraron que el talento joven sigue escribiendo nuevas historias en el béisbol moderno, incluso en tiempos donde dominar el pitcheo parece una misión imposible.

Su reto ahora será mantener el nivel y consolidarse como referentes de sus respectivas franquicias. Pero si algo dejó claro esta temporada, es que el futuro de MLB está en muy buenas manos.

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